La importación a gran escala de carne de cerdo polaca a Ucrania según los esquemas grises se realiza bajo la apariencia de despojos y manteca de cerdo, mientras que el control veterinario de los productos no tiene el nivel adecuado, o incluso no lo tiene en absoluto.
Uno de los líderes en la exportación de carne de cerdo a Ucrania es Polonia, donde durante varios años seguidos han estado luchando sin éxito con la PPA. Se detectaron 81 brotes de PPA y en 2018 ya se registraron 57 episodios.
Como lucha contra la enfermedad, en 2018 se planeó realizar 230 mil inspecciones de granjas, de las cuales se realizaron 6 mil inspecciones. Teniendo esto en cuenta, algunos países de la UE han reducido, o incluso se han negado por completo a importar carne de cerdo de Polonia.
Al mismo tiempo, el único mercado extranjero para Polonia era Ucrania, que también tiene sus propios productos cárnicos. Para competir con los productos ucranianos, los comerciantes polacos usan esquemas negros y grises. El contrabando se llama importación negra, y el gris es el suministro de un producto a un precio más bajo cuando se presenta como otro producto más barato. Entonces, de acuerdo con los documentos, el producto se registra como grasa y se importa un tipo costoso de carne.
Al mismo tiempo, el estado recibirá menos tarifas de seguro e incurrirá en pérdidas. En 2018, el daño estatal de estos esquemas ascendió a 850 millones de UAH. En condiciones de feroz competencia con carne de cerdo polaca barata, los criadores de cerdos ucranianos se ven obligados a reducir el costo de la carne. Los productores locales sufrieron pérdidas por un monto de 5 mil millones de UAH. La cantidad de capital de trabajo para los productores de carne de cerdo está disminuyendo, y Ucrania se está volviendo menos atractiva para los inversores.
El mayor peligro de la importación ilegal de carne de cerdo es la falta de un control veterinario adecuado. Dicha carne puede incluir bacterias dañinas para los humanos, virus y también daña la agricultura, la cría de animales como industria y el medio ambiente en general. En este contexto, la importación de carne contaminada es terrorismo biológico, ya que los ucranianos son alimentados con basura de carne.
